Competirá con un prototipo eléctrico
Volkswagen está desarrollando un coche de carreras completamente eléctrico para competir en la edición 2018 de Pikes Peak, la carrera de montaña más famosa del mundo.
La tentativa supone el regreso a esta mítica prueba 30 años después, con un nuevo reto, lograr un nuevo récord con la última tecnología en eléctrificación. El próximo 24 de junio de 2018, está previsto que este prototipo de tracción total esté presente en la parrilla de salida del Pikes Peak International Hill Climb en Colorado, EE.UU. Su objetivo: batir un nuevo récord entre los coches eléctricos en la llegada a la meta situada a 4.300 m de altitud. Este nuevo proyecto de Volkswagen Motorsport forma parte del proceso de transformación de la marca en el principal productor de vehículos eléctricos, en el que en 2025 la marca espera ofrecer hasta 23 modelos totalmente eléctricos.
Para la marca, la ascensión de Pikes Peak supone demostrar las capacidades de las nuevas tecnologías de baterías y propulsión de la marca. Las pruebas de esfuerzo extremas en Pikes Peak aportarán datos importantes que se aprovecharán para futuros desarrollos.
El vehículo de competición completamente eléctrico está siendo desarrollado por Volkswagen Motorsport en estrecha colaboración con el departamento de Desarrollo Técnico, en Wolfsburg. Volkswagen Motorsport participó en la carrera de montaña de Pikes Peak por última vez en 1987, y lo hizo con un espectacular Golf bimotor que por poco no logró alcanzar la meta.
La prueba Pikes Peak International Hill Climb – a la que los expertos llaman «Carrera hacia las nubes» – se disputa desde 1916 en las Montañas Rocosas, cerca de Colorado Springs. El circuito tiene una longitud de 19,99 km y un desnivel de 1.440 m hasta la meta, que se encuentra a 4.300 metros sobre el nivel del mar. El récord actual en la categoría de prototipos eléctricos es de 8 min. y 57,118 seg., que logró el piloto estadounidense Rhys Millen (e0 PP100) en 2016.