La CE propone simplificar los trámites de matriculación de vehículos en los traslados de residentes europeos entre los distintos estados miembros. Con ello se pretende evitar la situación de residentes temporales (estudiantes, trabajadores, etc) que en teoría deben cambiar las placas de sus coches al establecerse más de 6 meses en algunos países de la UE (el caso más sangrante es el de Portugal). Hoy por hoy los trámites llevan más de mes y medio y cuestan una media de 400 euros: Bruselas calcula que la medida supondrá un ahorro de 1.500 millones de euros anuales.