De momento, Mini ha presentado su “scooter” eléctrico en el Salón de París, aún como “concept” y así llamado (“E-Concept”). Un sencillo motor eléctrico sin transmisión (acoplado a la rueda posterior con reducción fija monomarcha) alimentado por una batería de ion-litio es su corazón motriz, sobre un diseño minimalista algo “retro”, con asiento longitudinal corrido para dos ocupantes. No se ha declarado su potencia, pero a la vista del motor y las baterías no debe tener más de 3 KW (unos 4 CV), suficientes para lograr hasta los 50 km/h.
Con ruedas muy pequeñas (llantas de 11”, apenas una más de las del primer Mini de hace medio siglo o de las de las primeras “scooter” italianas), escudo frontal tradicional y faro ovalado vertical, este nuevo Mini de dos ruedas evoca un poco el aire de familia de sus hermanos de 4, a lo que también ayuda su cuadro circular (con velocímetro e indicador de carga de batería) y su peculiar versión del Mini Center Rail, la guía vertical con ganchos que hace las veces de guantera, ya estrenada en el Mini Countryman.
Mini ha llegado a un acuerdo con Apple dotando a su moto de una fijación para su teléfono móvil inteligente, que hace las veces de llave, pantalla multifunción y mando central de arranque. Una vez conectado a su soporte, el “scooter” está listo para salir rodando, y mientras está en marcha, el móvil Apple sirve de navegador radio, teléfono ó reproductor musical, según se prefiera. Y a través de una conexión inalámbrica “bluetooth”, puede establecer comunicación con el casco del conductor, equipado con un micrófono y auriculares para seguir todas sus funciones.
El Mini Scooter tiene preinstaladas muchas funciones, incluso hasta un saludo luminoso automático (ráfaga de luz) cuando se cruza con otro Mini Scooter…
La recarga de la batería (“plug in”) no requiere conectores especiales, sólo un enchufe doméstico al que llega por un simple cable autoenrrollable de 5 metros (como el de un aspirador) mientras está aparcado. Mini no dice cuánto tarda en cargarla del todo, ni tampoco su autonomía, pero a la vista del tamaño de la batería, no serán más de dos ó tres horas (como tampoco será muy amplia su autonomía, no mayor en cualquier caso de 50 ó 60 km). Todavía “concept”, habrá que ver si Mini se atreve a comercializarlo y en caso afirmativo, cuándo. Pero al menos la posibilidad es real y ya funciona…
El otro “scooter” eléctrico es de Smart, también mostrado en París, en una fase más avanzada que permite deducir su pronta comercialización. Su diseño es más actual, con ruedas mayores (14”) y la típica ergonomía funcional de Smart. La marca del utilitario de Mercedes hace frente a la del de BMW con un vehículo ligero (acero y aluminio) revestido de paneles de plástico intercambiables para un entretenimiento y reparación más fáciles. Frontal compacto y estrecho, faro superior mínimo (por diodos, como la luz trasera) y un alto equipamiento de seguridad que incluye frenos ABS, airbag integrado bajo el manillar y asistente de ángulo muerto, constituyen sus principales virtudes.
Lleva un motor eléctrico asíncrono de 4 KW con transmisión directa a la rueda trasera, alimentado por una batería de ion-litio de 48 voltios de tensión y 80 Ah de capacidad, que le permite una velocidad máxima de 45 km/h y le asegura una autonomía de 100 km. Su recarga es igualmente por enchufe doméstico, como en el Mini, con un máximo de 5 horas para una recarga completa. Una peculiaridad de sus frenos es que el ABS se activa mediante una única manilla a la rueda delantera, única con circuito hidráulico, ya que la rueda trasera sólo frena eléctricamente con el motor, aprovechando para cargar la batería.
Así, durante la frenada el motor hace de generador, recargando la batería de ion-litio, que además también se recarga mediante unas pequeños paneles solares en el escudo frontal, que trabajan incluso cuando el Smart Scooter está circulando.
Finalmente, y también como Mini, Smart también ha desarrollado una aplicación propia para el manejo del iPhone de Apple durante la conducción (“Smart Drive”), por la que el iPhone se convierte en un ordenador de a bordo multimedia, específicamente adaptado al Smart Scooter. Así, sirve también de velocímetro e indicador de carga de la batería, además de funcionar igualmente como navegador. Y hasta posee un dispositivo de buscador, que permite localizarlo fácilmente cuando está aparcado. Aún prototipo, pero en una fase mucho más avanzada que el de Mini, es muy posible que veamos muy pronto la versión final de calle de este Smart Scooter eléctrico.