Inalcanzable en todos los sentidos
La firma croata Rimac especializada en superdeportivos eléctricos anuncia la comercialización definitiva de su Rimac Nevera, que se presenta como el hiperdeportivo eléctrico más rápido del mundo, con sus casi 2.000 CV y más de 400 km/h de velocidad punta.
Mostrado como prototipo en el Salón de Ginebra de 2018, ha alcanzado su puesta a punto definitiva a finales de este 2021, tras su presentación oficial el pasado mes de junio. El nombre de Nevera no es por su afinidad a un frigorífico sino por ser el nombre de una furiosa tormenta del Adriático que azota cíclicamente las costas de Croacia.
Rimac es la creación de un visionario, el ingeniero croata Mate Rimac quien va a levantar una nueva planta de montaje en Zagreb para sus coches tras lograr una inversión de 200 millones de euros para la misma. Vanguardista y rompedor, este nacionalista croata tiene fama de no atenerse a compromisos industriales, y como fundador y director ejecutivo de la misma, su objetivo es destronar la supremacía italiana en el campo de los superdeportivos de la mano de la tracción eléctrica, y el Nevera es su arma principal para ello.
Por eso su producción limitada de 150 unidades a un precio astronómico de dos millones de euros es todo un desafío, que espera cumplir comercializándolo y homologándolo en 19 países (incluso una de las unidades de preserie pasará el ‘crash test’ necesario para superar la prueba del EuroNCAP) y vendiendo cada ejemplar tras haberlo probado y aprobado personalmente antes de entregarlo a cada cliente.
Sofisticada gestión de la potencia
El Nevera es la versión final de producción del prototipo Rimac C Two de 2018, un superdeportivo eléctrico dotado de 4 motores (uno por rueda) con 352 kW cada uno de potencia, que suman una potencia total de 1.408 kW (1.914 CV) con un descomunal par máximo de 2.360 Nm (240,7 mkg).
Su sistema de reparto de la tracción total AWTV2 (All Wheel Torque Vectoring 2) permite que lleguen a las ruedas el máximo par capaz de transmitir su movimiento al suelo sin llegar a patinar, por lo que además sustituye a los programas electrónicos de estabilidad tradicionales (ESP). Gracias a ello cubre el 0-100 km/h en 1,9 segundos y alcanza una velocidad punta de 412 km/h (con una estimación máxima prevista de 420 km/h, todavía lejos de los Bugatti Chiron, Bolide y SSC Tuatara, más ligeros y con motores de combustión sobrealimentados). El 0-200 km/h lo cubre en algo más de 5 segundos, y el 0-300 km/h en 9,3…
Para el mundo anglosajón ha homologado el 0-100 millas por hora en 4,3 segundos y el cuarto de milla desde parado (402 m) en 8,6 segundos. Unas hiperprestaciones cronometradas en EE.UU. ante notario, con la realización de tres pruebas, con neumáticos bastante comunes Michelin Pilot Sport 4S con los que en frío logró cubrir el cuarto de milla en 8,74 segundos a una velocidad de 165,5 mph (266 km/h). En el segundo intento y tras previo calentamiento de las ruedas logró un crono de 8,61 s en el mismo registro, y en el tercer intento, ya con neumáticos bien calientes a la presión adecuada, el Nevera recorrió la pista en 8,58 segundos, a una velocidad máxima de 167,5 mph, casi 270 km/h.
Aerodinámica superior y peso contenido
Con un llamativo diseño, las medidas del Nevera son bastante comedidas, con una carrocería en fibra de carbono de 4,75 m de largo por 1,97 m de ancho y 1,21 m de alto, sobre una plataforma de 2,75 m de batalla. El peso inicial de 1.950 kg ha acabado incrementándose en casi 200 más (2.150 kg), debido especialmente al peso de las 6.960 celdas de sus baterías de litio, manganeso y níquel, refrigeradas por líquido y con 120 kW/h de capacidad.
Para un mejor reparto de peso, están distribuidas en forma de H, con el mayor grupo delante del eje trasero, ofreciendo un reparto del peso del 48% delante por el 52% detrás. Rimac afirma haber mejorado un 34% la eficiencia aerodinámica del modelo, con un minucioso control del flujo de aire de las tomas y conductos del mismo para lograr la adecuada refrigeración de los frenos y de la cadena motriz, mejorando un 30% la penetración a bajas velocidades y un 7% en las altas. El monocasco es especialmente ligero, e incluye un techo de fibra de carbono que forma parte estructural del mismo junto al bastidor auxiliar trasero, también en fibra de carbono, compuesto por 2.200 capas de la misma junto a 222 inserciones de aluminio, logrando un peso final del monocasco de sólo 200 kg.
El diseño, la clave aerodinámica
Estéticamente el Rimac Nevera presenta unas formas afiladas y esbeltas, discretamente angulosas, con un frontal de faros de diodos muy estilizados con una fina moldura a modo de parrillas y varias tomas de aire con entrada selectiva del mismo. Monta un gran deflector para generar mayor carga aerodinámica y un capó delantero con salida de aire del flujo frontal, que permite mejorar hasta un 30% la eficiencia de la refrigeración. Un morro largo y un parabrisas muy inclinado dan paso a un techo bajo que baja suave hasta la zaga. Tras las aletas delanteras tenemos una nueva salida de aire en las puertas, contrapuesta a una toma anterior y la popa se remata con un gran alerón activo, unos finos grupos ópticos de diodos y un amplio escudo difusor cubriendo la zona del paragolpes trasero.
Para mantenerlo fijado al suelo a las altísimas velocidades de las que es capaz este Nevera, Rimac lo ha dotado de varios elementos aerodinámicos activos para permitirle el máximo agarre dentro de cada situación, pudiendo variar entre el modo ‘LowDrag’, que reduce su Cx a 0,30, y el ‘High Downforce’, que aumenta su carga aerodinámica en nada menos que el 326%. Por otra parte cuenta con hasta 7 modos de conducción distintos que alteran la respuesta y comportamiento del vehículo: Sport, Drift, Comfort, Range, Track y luego dos modos más personalizados, con uno (Track) específico para competir, al que a partir de 2022 se le podrá sacar el máximo partido gracias al Driving Coach, un asistente de inteligencia artificial que mediante 12 sensores ultrasónicos, 13 cámaras, 6 radares y el sistema operativo Pegasus de NVIDIA, aconseja en directo al piloto como mejorar su trazada y sus tiempos sobre la pista.
Y como tan importante como correr es parar, Rimac no se ha olvidado de los frenos, donde aparte de contar con una muy potente frenada regenerativa eléctrica, ofrece un equipo convencional de alto rendimiento, con discos carbocerámicos Brembo de 390 mm de diámetro en las 4 ruedas dotados de pinzas de 6 pistones. Y tampoco es un superdeportivo carente de confort, ya que gracias a su suspensión activa es capaz de ofrecer un aceptable grado de comodidad en carretera abierta.
Batería sofisticada con diseño en H
Pero el mayor secreto del Rimac Nevera está en sus baterías, sobre cuya composición, capacidad y entrega la marca no da demasiada información; aparte de los 120 kW/h de su capacidad (no sabemos si bruta o útil) el dato más significativo es el de que puede cargarse hasta en puntos de 500 kW en corriente continua, lo que viene a duplicar la capacidad de carga de coches eléctricos como el Porsche Taycan o el Tesla V3. De este modo puede recuperar el 80% de su carga en 22 minutos, un tiempo absolutamente récord entre los eléctricos.
Y en cuanto a autonomía, Rimac afirma que puede rodar 547 km bajo el ciclo WLTP. El diseño en H de la batería no es caprichoso, sino que obedece a conseguir el mejor reparto de peso a la vez que contribuye a la rigidez del monocasco (refuerza en un 35% su rigidez a la torsión, alcanzando los 70.000 Nm por grado). El peso bruto de las baterías no se indica, pero en función de el del coche es evidente que debe acercarse a la media tonelada…
Habitáculo deportivo para dos
En el interior, se aprecia la tapicería de cuero en todo el habitáculo, con algunos elementos en aluminio (los mandos rotatorios bajo la consola central para ciertas funciones) que dan el toque analógico al dominante entorno digital, con tres grandes pantallas de alta definición en el salpicadero, para el cuadro de instrumentación la primera, otra para el sistema multimedia central y otra para el acompañante. Dentro de un ambiente más bien austero, queda espacio suficiente para dos ocupantes vestidos con mono y casco de carreras, así como un maletero para su equipaje.
Aunque las primeras unidades no se entregarán hasta bien entrado 2022, no por tratarse de una edición limitada este Nevera de Rimac va a dejar de ofrecerse en hasta tres niveles de acabado (a gusto del cliente, dada su construcción artesanal) que Rimac denomina GT, Signature y Timeless, amén de un edición especial de lanzamiento Bespoke que ofrecerá mayores posibilidades de personalización, y con ello también una mayor desviación de su precio de partida, que podrá superar largamente los dos millones de euros inicialmente previstos. Que no se diga que por precio no va a ser menos el superdeportivo eléctrico más potente del mercado…