Porsche ha premiado a GKN Driveline con el reconocimiento de «Socio Tecnológico» por su desarrollo de la transmisión eAxle de alto rendimiento para el 918 Spyder, su superdeportivo híbrido avanzado. El módulo eAxle de GKN Driveline soporta el modo totalmente eléctrico, tracción a las cuatro ruedas y proporciona una función Boost (de refuerzo).
El Director de Porsche Powertrain, Christian Hauck, comentó: «Hacer realidad nuestra visión de un coche súper deportivo capaz de establecer un tiempo de vuelta récord en el circuito de Nurburgring y de lograr una eficiencia de combustible de 3 litros a los 100 km supuso una enorme exigencia para nuestros ingenieros y proveedores. El papel de GKN Driveline en el programa de desarrollo y su innovador módulo eAxle ha obtenido el reconocimiento por parte de la compañía de «Socio Tecnológico de Porsche».
El Presidente de Ingeniería de GKN Driveline, Peter Moelgg, añadió: «Ser elegidos como «Socios Tecnológicos» de Porsche en el programa del 918 Spyder fue una oportunidad perfecta para que nuestro equipo e-drive global manifestase hasta qué punto poner la tecnología correcta a bordo de un coche puede mejorar tanto la eficiencia del combustible como el rendimiento dinámico. El premio consolida la posición de GKN Driveline como líder del sector en sistemas e-drive. Nuestra tecnología eAxle sigue evolucionando y esperamos que muchos más vehículos de alto rendimiento adopten conceptos de transmisión similares en los próximos años.»
El eAxle que complementa el motor híbrido V8 de 4,6 litros del 918 Spyder es una evolución del innovador accionamiento eAxle de la compañía. El módulo tiene una potencia máxima de 95kW y puede rendir hasta un par de 1500 Nm en las ruedas delanteras gracias a una relación de transmisión fija. El diferencial compacto especialmente desarrollado se acopla al par sin problemas, ofreciendo al 918 Spyder una distribución de potencia óptima en todo momento. El diferencial también desacopla el módulo para minimizar las pérdidas de resistencia aerodinámica y maximizar la eficiencia. A velocidades por encima de 265 km/h (164 mph), el embrague aísla el motor eléctrico para evitar la sobre-rotación.
Un objetivo clave del 918 Spyder era tener tanto el centro de gravedad como la distancia al suelo lo más bajo posible. Para lograrlo, se necesitaba una original solución de ingeniería: GKN Driveline posicionó el acoplamiento de la transmisión utilizando un innovador concepto de lubricación para gestionar el flujo de aceite.
El depósito de aceite va instalado por encima y no por debajo del tren de engranaje. El aceite cae gracias a la gravedad en los cojinetes y engranajes hasta que llega a la entrada de alta velocidad en el fondo donde entonces circula de regreso al depósito de aceite situado en la parte superior. Este diseño minimiza la cantidad de aceite en el eje de entrada, manteniendo unas pérdidas por salpicaduras mínimas. Para garantizar que las zonas críticas se mantengan lubricadas incluso en modo desconectado, el motor es accionado a intervalos breves e intermitentes para mantener un flujo constante de aceite.
El ajustado diseño compacto del Porsche 918 Spyder también implica que casi no haya flujo de aire alrededor de la transmisión, por lo que es necesaria la refrigeración por agua para gestionar el calor generado por la alta densidad de potencia del módulo. «Para responder a los ambiciosos objetivos del 918 Spyder en cuanto a peso, densidad de potencia, NVH y durabilidad, hemos usado unas vanguardistas herramientas de simulación y análisis desarrolladas internamente para optimizar el tren de engranaje», aseguró Moelgg. «Un eAxle que responde tanto a los requisitos de Porsche como a las exigencias de Nurburgring puede rendir en cualquier situación.»