Ya ha entrado en vigor en la Unión Europea el permiso unificado europeo de conducción de vehículos a motor, cuyo formato es en forma de tarjeta plastificada. De todos modos, no se ha logrado unificar totalmente los criterios, y aunque se ha introducido la necesidad de renovación obligatoria, los plazos difieren mucho (15 años en la mayoría de los países en vez de los 10 años españoles, con muchos con permiso perpetuo a partir de los 70 años de edad) así como la tipificación de categorías (permiso conjunto de motos y coches en unos países, independiente en otros, etc). Al menos se trata de un primer paso que impone un preceptivo examen para obtenerlo, y facilita reducir formatos y evitar fraudes (se siguen “comprando” carnets en muchos países del Este).