Funcionalidad práctica, ahora hibridada
Tras dar a conocer la berlina 5 puertas de la tercera generación del 308, la firma del león desvela ahora su versión con carrocería familiar, el Peugeot 308 SW 2022, con elementos comunes con la berlina pero más habitable y funcional.
Los familiares desarrollados a partir de los turismos compactos figuran entre los más codiciados del mercado, por ello hay una variada oferta generalista, como lo demuestran modelos como el Corolla Touring Sports de Toyota, el Mégane Sport Tourer de Renault o el Seat León Sportstourer, sin olvidar los Kia Ceed Tourer y Proceed GT, Hyundai i30 CW, Ford Focus Sportbreak, VW Golf Variant… Son coches prácticos y funcionales que cubren bien las necesidades de espacio frente a modelos de segmentos mayores.
Concebido sobre la plataforma EMP2 del grupo PSA (ahora Stellantis), el nuevo 308 SW es un poco más largo y ancho que su predecesor, con una estampa más deportiva y estilizada, al ser algo más bajo (1,44 m, 2 cm menos). La distancia entre ejes es prácticamente la misma del anterior 308 SW (2.732 mm, sólo 2 mm más, o sea 2,73 m) aunque crece 5,5 cm respecto a la batalla de la berlina, mientras que el maletero cubica también lo mismo (608 litros, 2 menos que antes), aunque el total con 2 plazas disminuye un poco más (1.634 litros frente a 1.660 antes), disminución mayor en las versiones híbridas al tener que hacer sitio a las baterías (548 litros y 1.574 con dos plazas). Sin olvidar que son litros brutos (“de agua”, dice Peugeot), no VDA, por lo que en realidad el volumen es algo menor…
En total, mide 4,64 m de largo (5 cm más), otros 5 cm más de ancho (1,85 m) y 1,44 m de alto (-2 cm). Comparado con el 308 berlina la ganancia es mayor (casi 200 litros más de maletero y casi 6 cm más de batalla), con la ventaja de su modularidad trasera, con asientos plegables en formato 40:20:40 mediante unos mandos en los laterales del maletero, sirviendo el respaldo plegable central de trampilla para objetos largos de más de 1,85 m. Pero por lo demás queda muy próximo del 308 SW saliente, con un ligero mayor voladizo posterior (+ 5 cm de largo total, y 21 cm respecto a la berlina).
Su estampa es ahora más afilada, lo que se nota en la mejora de su Cx (no llega a 0,28), una mejora aerodinámica que según Peugeot reduce hasta en 2 gramos sus emisiones por km de CO2. Pero tenemos el mismo frontal del 308 berlina con el nuevo logo Peugeot sobre la parrilla frontal, las ópticas más estilizadas de los faros con su luz diurna de diodos resumida en dos líneas casi verticales en forma de “colmillos” según la marca, descendiendo hasta el paragolpes. Los faros son de diodos, y en opción de tipo matricial selectivo, y el tren rodante ofrece llantas de 16” a 18” de diámetro.
Hay 7 colores disponibles de carrocería (azul Avatar, rojo Elixir, blanco Perla, blanco Banquise, gris Artense, gris Platino y negro Perla Nera), y en la zaga destaca la impresión de anchura subrayada por una moldura negra horizontal inferior, con unos grupos ópticos también más horizontales. Cuenta con barras de techo, y ya en opción puede montar elementos tales como asientos delanteros con función de masaje, equipo de sonido Focal con 10 altavoces, parabrisas calefactado o lunas delanteras laminadas (dos capas de vidrio separadas por una de resina) más resistentes y aislantes. Y en la aleta trasera izquierda al otro lado de la boca del depósito de gasolina, tenemos el enchufe de recarga eléctrica.
Interior amplio y muy capaz
En el interior, salpicadero y plazas delanteras son idénticas a la de la berlina, con el cuadro en formato “i-Cockpit”, o sea el volante más pequeño y bajo para ver el cuadro por encima de él. La pantalla multimedia central es de 10”, en posición ligeramente baja y orientada al conductor, y cuenta con asistente de voz capaz de entender órdenes de “lenguaje natural” y navegador GPS (TomTom). Las versiones automáticas con cambio EAT8 llevan el selector de marchas al pie de la consola central, así como el mando de selección de 5 modos de conducción (Electric, Hybrid, Eco, Normal y Sport), junto a otros detalles ya presentes en la berlina (posavasos, huecos portaobjetos –suman 34 litros entre la guantera y el del apoyacodos central-, tomas USB, etc).
Las plazas traseras mejoran un poco su habitabilidad sobre la nueva berlina (pero no sobre el actual SW), al ganar un poco de altura al techo, pero el espacio para piernas es prácticamente el mismo. El portón trasero puede contar apertura automática y “manos libres” (pasando el pie por debajo del paragolpes) y ahora la cortina cubreequipajes se enrolla de forma más fácil, con un solo toque yendo fijada a los carriles laterales. En el hueco del maletero tenemos toma de corriente a 12V, dos redes sujetabultos y ganchos portabolsas, con un piso plano en posición única en las versiones híbridas, y pudiendo fijarse a dos alturas en las que sólo montan motor de gasolina o diésel. En este caso, el hueco que ocupan las baterías del motor eléctrico da paso a una bandeja portaobjetos (donde se puede alojar también la cortina cubreequipajes).
Con nuevos propulsores hibridados
En el plano motriz tenemos la misma oferta anunciada del 308 berlina; los PureTech de gasolina, con el motor de 3 cilindros turbo e inyección directa en dos niveles de potencia, 110 y 131 CV, con cambio manual de 6 marchas (y el automático EAT8 de 8 en opción en el segundo), y un diésel de 131 CV (el 1.5 BlueHDI) con cambio manual de 6 relaciones o automático EAT8.
Pero la gran novedad de este nuevo 308 SW son sus dos versiones híbridas enchufables Hybrid 225 e Hybrid 180, con derecho a lucir la etiqueta medioambiental “Cero” de la DGT. Ambas montan el cambio automático EAT8 por convertidor de par. El Hybrid 180 e-EAT8 monta la versión más potente del 1.2 PureTech de gasolina (155 CV) junto a uno eléctrico de 81 kW (110 CV), acoplado a la caja e-EAT8. Su potencia total conjunta es de 180 CV y homologa hasta 60 km de autonomía eléctrica (WLTP), con un promedio de emisiones de 25 g/km de C0₂.
Por su parte, el Hybrid 225 e-EAT8 aumenta la potencia de su motor 1.2 PureTech hasta los 180 CV que se suman a los 81 kW (110 CV) del motor eléctrico, arrojando una potencia total conjunta de 224 CV, con una media de 36 g/km de C0₂ y una autonomía eléctrica prácticamente igual (59 km).
El paquete de baterías de ion-litio que alimenta estos motores es el mismo; un bloque de 12,4 kW/h tanto para el Hybrid 180 como para el Hybrid 225, con un cargador de serie monofásico de 3,7 kW que permite una carga completa en 7 horas desde un enchufe doméstico de 8ª (si es de 16A el tiempo baja a tres horas y media). En opción se puede pedir un cargador de más capacidad (7,4 kW) con el que el tiempo total de recarga baja de dos horas (eso sí, desde una estación o poste “wall box” de 32A de fuerza).
Elementos de seguridad activa
Este nuevo Peugeot 308 SW 2022, cuenta con todas las ayudas a la conducción del 308 berlina, de serie o en opción, como control de crucero adaptativo inteligente, frenada automática de emergencia (con detector de peatones y ciclistas día/noche), alerta activa por salida de carril, detector de fatiga de conducción, asistente de luces de carretera, detector de presencia en ángulo muerto, alerta por tráfico cruzado trasero o lector de señales de tráfico. Asimismo, dentro del pack Drive Assist 2.0, entra el control de crucero inteligente (con función Stop &Go) capaz de cambio semiautónomo de carril, y adaptación de velocidad en curva (hasta 180 km).
Y ya, según el nivel de acabado (Active Pack, Allure, Allure Pack, GT y GT Pack), elementos de confort como el freno de mano eléctrico, la apertura del portón trasero manos libres, arranque y acceso sin llave, parabrisas y volante calefactados, orientación de los retrovisores marcha atrás o techo panorámico practicable, entre otros.
Fabricado en la planta alsaciana de Mulhouse, como el 308 berlina, las primeras entregas de este 308 SW están previstas para principios de 2022, pudiendo solicitarse ya desde 22.400 euros (con descuentos incluidos) a través de la página web de la marca.