No se trata de una llamada a revisión (aunque podría dar lugar a ella), sino de un incidente ocurrido en Japón durante un test de pruebas ante un cliente el pasado noviembre, en el que una supuesta malfunción del asistente de frenada urbana automática (SCBS, Smart City Brake) provocó un choque en el que resultaron heridos los dos ocupantes de un CX-5 (el cliente probador y un agente comercial del concesionario afectado, Mazda Autozam, que era la empresa organizadora del test en la ciudad de Fukaya, en el distrito de Saitama). Es la primera vez que sucede un caso así, y se está procediendo a una doble investigación, tanto policial como interna a cargo de Mazda para comprobar si se cumplieron todas las condiciones requeridas para la correcta aplicación de la frenada automática del SCBS. Mientras la investigación se lleva a cabo, Mazda ha suspendido todos los test de prueba demostrativos del funcionamiento del SCBS, y según aclaren los resultados de la misma, la marca nipona tomará las contramedidas necesarias para restablecer la confianza en el SCBS del CX-5.
