JORGE FERNANDEZ
El resurgir de Lancia
La próxima semana Lancia llevará a cabo su Design Day, un evento en el que reivindicará, a través del diseño, su exitosa historia automovilística de casi 116 años a través de modelos exclusivos que la han llevado a ser hasta el coche oficial del presidente italiano. Sin embargo, su época deportiva final descansó en tres modelos míticos con alma propia que dominaron el Mundial de Rally: los Lancia Stratos, Rally 037 y Delta.
Lancia Stratos, inconfundible
El Lancia Stratos es de esos modelos de rally imposibles de olvidar, con con los seis faros redondos y su afilada forma. Inspirado en el prototipo Stratos Zero de 1970, montaba el motor V6 del Ferrari Dino 246. Diseñado y construido para sobresalir en la competición de rally, montaba un capó y un maletero fabricado con materiales ligeros, y que incluían los guardabarros dentro de la misma pieza. Estas aletas eran muy abiertos para facilitar el trabajo de los mecánicos durante la carrera, aprovechando también la sobreelevación que procuraban sus amortiguadores. El interior estaba enfocado a la carrera, con solo los mandos necesarios para la misma y dos compartimentos para guardar los cascos.

El Lancia Stratos HF Grupo 4 se alzó con el título en el Rally de Montecarlo en tres ocasiones consecutivas, gano dos veces el Mundial de Constructores en los años 1975 y 1976, ganó varias veces el Europeo de pilotos y en 1977 obtuvo una victoria en la Copa Mundial FIA para pilotos de rally con Sandro Munari al volante.
El Lancia 037, campeón en 1983
Presentada la versión de calle en 1982, fue el último en ganar un rally montando tracción a dos ruedas en 1983, ganando a otros modelos que ya disfrutaban de la tracción integral. Creado a partir del Beta Montecarlo, el Lancia Rally 037 no se pensó para fabricarse en una gran tirada, sino que la fabricación del vehículo de calle únicamente le abrió el camino a su entrada en el mundo del rally.

El diseño de la carrocería corrió a cargo de Pininfarina, combinando elegancia y la agresividad de un modelo deportivo como era el Lancia Rally 037. Se fabricó en poliéster con refuerzos de fibra de vidrio, consiguiendo así una carrocería muy ligera. El capó, el motor y el maletero se podían desmontar fácilmente, y el interior era espartano, pensado para las carreras y por lo tanto carente de refinamiento. Consiguió el segundo puesto en el Mundial de pilotos y el Campeonato italiano y europeo con Miki Biasion, que pronto correría con los míticos colores de la escudería oficial de Lancia Martini.
Lancia Delta
Es el último monstruo de la competición de Lancia y nos tenemos que ir al año 1988 para encontrar este modelo, con su conocido frontal con salidas de aire sobredimensionadas y unos pasos de rueda también de mayor tamaño, lo que permitía montar unos neumáticos más anchos.

El Delta tiene un palmares impresionante, y es que con alguna de las cuatro evoluciones de la versión Lancia Delta HF con tracción integral ganó seis veces el Campeonato Mundial de Rally Constructores, cuatro veces el Campeonato de Rally Pilotos, seis veces el Campeonato Europeo de Rally, dos veces el Campeonato Europeo de Rally Producción y una vez el Campeonato Mundial de Rally Producción.