Ahora, de tú a tú con la competencia
La llegada a partir de abril de la cuarta generación del Kia Rio va a agitar y mucho el segmento de los coches del segmento B. Si hasta ahora el modelo quedaba algo discreto y un poco rezagado en algunos aspectos, con el incremento de equipamiento y precios más ajustados, luchará de tú a tú con sus clásicos competidores.
Kia es el único fabricante de automóviles que crece en Europa los últimos ocho años de forma consecutiva. Ha llegado a las 436.000 unidades en 2016 y las previsión es la de situarse en 2017 en los 460.000 coches, pasando del 2,9 de cuota al 5,6 en 2018, saltando al medio millón de unidades. En nuestro país las cosas van incluso mejor, llegando en 2016 a las 51.400 unidades, lo que representa un 4,7 por ciento del mercado, saltando desde 2012 de 18.000 uds. y un 2,7 de cuota.
Para el nuevo Rio se han tomado importantes decisiones, que en primer lugar afectan a sus dimensiones y que pretenden colmar las necesidades de movilidad del mayor número de clientes. Su plataforma crece en 10 mm de distancia entre ejes, medida capital para conseguir un interior generoso en tamaño, y 15 mm más de longitud. La pérdida de 5 mm en altura y ganar 5 mm en su anchura, modifican ligeramente sus proporciones, traduciéndose en un interior de lo más amplio de su categoría. A todo esto, si le sumamos su maletero de 325 litros, ya podemos adelantar que en todo lo que sea espacio, el nuevo Kia Rio va bastante bien servido.
El exterior es continuista pero mejora sin duda su imagen en aspectos como la mayor presencia del frontal en el diseño, con grupos ópticos que presentan la firma luminosa de la luz de día en forma de U. No juega demasiado con la innovación, pero en general el efecto conseguido es el de un coche agradable en su estilo, sin estridencias, con un diseño más emocional que le hará tener más seguidores. Destaca el capó delantero, con refuerzos que contribuyen a una mayor personalidad, el voladizo trasero más corto y los pilares C más reducidos. Para culminar el efecto estético exterior, se han elegido hasta 7 colores de carrocería, dos de ellos nuevos, y tres diseños de llantas con 15 y 17 pulgadas de diámetro. Por último, la carrocería elegida ha sido la de cinco puertas, descartándose que exista una versión con tres puertas debido a su escasa demanda actual.
Moderno interior.- Por dentro ha sido estudiado y modificado pensando en la mayor cantidad de elementos de comunicaciones, entretenimiento y seguridad disponibles en este nueva generación del Rio. La verdad es que si lo analizamos, las sensaciones que traslada son favorables. El conductor ha sido bien situado en el centro de las operaciones, colocando en la consola central una pantalla táctil flotante de alta resolución que reúne buena parte de las funciones disponibles. Es cierto que los plásticos podrían ser mejores, o más disimulados, pero en general los ajustes son bastante buenos. También son excelentes los asientos, tanto en confort como en capacidad de sujeción, y, después de algunos kilómetros en las plazas traseras, también podemos añadir que no proporciona ninguna sensación de agobio, justo lo contrario. Únicamente criticar que los volantes son ligeramente grandes. Uno o dos centímetros menos de diámetro no perjudicaría y la sensación percibida sería más favorable.
Por otro lado, todos estos cambios lo que han traído consigo ha sido una mejora en las cotas interiores. El espacio para las piernas crece hasta los 1.070 mm delante y hasta los 850 mm detrás, con una importante cota de anchura a la altura de los hombros, con 1.375 mm delante y 1.355 mm detrás. Por último el espacio para las cabezas es de 1.020 mm delante y 964 mm detrás. Su maletero tiene una capacidad de 325 litros, 37 más que en la generación anterior. También incluido en el espacio interior destacan los huecos para almacenamiento entre los que están el espacio para botellas de 1,5 litros en las puertas delanteras. Para finalizar, el depósito de combustible crece hasta los 45 litros, dos más que antes, con lo que se mejora la autonomía entre 34 y 58 km según la motorización.
Para este nuevo modelo se han definido tres acabados: Concept, Drive -columna vertebral de la oferta- y el Tech, que en general mejoran desde el inicio su dotación en comparación con el anterior, añadiendo de serie o como opcionales elementos de máxima seguridad como el control de presión de los neumáticos, los sensores de aparcamiento trasero, el asistente al mantenimiento de carril o el sistema de frenada de emergencia (colisión frontal) con reconocimiento de peatones, reunidos estos dos últimos en un pack.
Dentro ya de las modificaciones técnicas establecidas en este nuevo Kia Rio, hay que destacar la nueva estructura, realizada en aceros de alta resistencia en un 55 por ciento, que ha permitido disminuir el peso de la carrocería en un 5 por ciento. Esta nueva estructura, los asistentes a la conducción y hasta seis airbags le han permitido obtener las cinco estrellas Euro NCAP. Pero la estructura del nuevo kia Rio no solo ha mejorado en rigidez y ahorro de peso. Además las nuevas técnicas de diseño han permitido disminuir la sonoridad en marcha y las vibraciones, añadiendo materiales fonoabsorbentes en aquellos puntos en los que se producían aumentos de la sonodidad.
Nuevo motor de 1.0 litros.- La gama de motores que se ofrecerán desde abril, fecha en la que arrancarán las entregas del nuevo Rio, estará compuesta por cuatro opciones, dos diésel de baja potencia y dos de gasolina. Los primeros, ambos con 1.4 litros y dos niveles de potencia: 70 y 90 CV. Entre los motores de gasolina destaca el nuevo motor de tres cilindros, 1.0 litros y 100 CV de potencia, que pensamos será la motorización más demandada. Este motor ya formaba parte de la gama cee´d de 2015 y se caracteriza por emplear la inyección directa y la sobrealimentación para mejorar el rendimiento. Esta versión de 100 CV, la que llegará en primer lugar, tiene un consumo combinado de 4,3 litros.
Por debajo nos encontramos con el motor atmosférico de 1.2 litros de cilindrada y 84 CV, que aunque pudiera parecer un tanto escaso no nos defraudó. Ya para 2018 llegarán los cambios automáticos de doble embrague, los acabados deportivos GT-Line y una nueva versión de gasolina con el motor de 1.0 litros, pero con un rendimiento aumentado de 120 CV de potencia. Estos motores de gasolina se apoyan en transmisiones manuales de 5 relaciones, o de 6 si estamos hablando de los dos motores diésel.
El esquema de suspensiones es el habitual en este tipo de vehículo, con un sistema McPherson delante y unas ruedas de eje torsional detrás con buenas reacciones al conducir tanto de confort como de estabilidad, lo mismo que el sistema de frenos que deja la responsabilidad de parar el vehículo a unos discos ventilados en el eje delantero y a unos muy tradicionales tambores en las ruedas posteriores.
En general las sensaciones han sido muy satisfactorias. El motor de gasolina de 100 CV nos ofrece una buena prestación, con una aceleración de 0 a 100 km/h de 10,7 s y unos consumos oficiales de 4,3 litros de media oficial. Su funcionamiento es especialmente suave y gira con una sonoridad muy contenida. El bastidor también ayuda y no poco, lo mismo que el manejo del cambio, que nos revela en general una excelente agilidad, solo limitada en parte por la elección de la motorización. La oferta diésel también está contemplada. Desde luego el 90 CV es el más indicado, convirtiéndose también en una inestimable ayuda si queremos explorar las innegables dotes viajeras del Rio.
Hay que destacar que uno de los mayores avances de los que puede presumir este nuevo Rio es en todo aquello que afecta a los sistemas de seguridad (dispone de 6 airbags y anclajes Isofix para sillas de niños tanto delante como detrás) y comunicaciones. Las dos plataformas: Android y Apple podrán integrarse sin problemas en el vehículo, trasladando la información de nuestro Smartphone al sistema central del vehículo. A través de la pantalla de 5 pulgadas, o de 7 si elegimos el navegador, se controlan servicios de entretenimiento, aplicaciones o simplemente la agenda del móvil, para facilitarnos establecer comunicación vía teléfono. Incluso se podrá controla por voz todas las funciones de la forma más segura posible. La recarga y conexión al vehículo de nuestros smartphones tampoco será un problema, ya que existan tomas USB tanto para las plazas delanteras como para las posteriores.
Los precios arrancan en los 14.600 euros para el Kis Rio 1.2 CVVT Concept, y culminan en el 1.4 CRDi WGT Tech de 90 CV, que sube hasta los 19.900 euros. Todos estos precios están bonificados con un descuento general de 2.300 euros, al que hay que añadir otros 750 de rebaja si financiamos nuestro vehículo con la marca. Como ya hemos comentado, la versión quizás más equilibrada sea en estos momentos el Rio 1.0 T-GDI Drive con 100 CV que por 14.450 euros nos ofrece un buen comportamiento con un nivel de dotación bastante generoso y un precio bastante competitivo.
Precios (€)
1.2 CVVT Concept 84 | 14.600 |
1.2 CVVT Drive 84 | 16.500 |
1.2 CVVT Tech 84 | 17.600 |
1.0 T-GDi Concept 100 | 16.175 |
1.0 T-GDi Drive 100 | 17.500 |
1.0 T-GDi Tech 100 | 18.600 |
1.4 CRDi WGT Concept 70 | 16.975 |
1.4 CRDi WGT Drive 70 | 18.300 |
1.4 CRDi WGT Concept 90 | 17.475 |
1.4 CRDi WGT Drive 90 | 18.800 |
1.4 CRDi WGT Tech 90 | 19.900 |