Jeep Renegade y Compass 4xe (Primera prueba)

21 octubre, 2020
LUIS M. VITORIA

Híbridos enchufables con tracción total eléctrica

Jeep se estrena en la electrificación en los Renegade y Compass, modelos que abren su oferta ahora con la denominación 4xe, híbridos enchufables con tracción total y autonomía eléctrica para más de 40 km.

En 2022 FCA tendrá ya 30 modelos electrificados, alcanzando así la energía eléctrica a toda la gama. Si los primeros pasos se dieron a principios de año con el lanzamiento de las versiones microhíbridadas de los Fiat 500 y Panda, a los que siguió la puesta de largo del Fiat 500e, ya exclusivamente eléctrico; ahora le toca a Jeep dar el siguiente. Este es hacia la hibridación enchufable y se produce no con un coche, sino simultáneamente con dos modelos: Renegade y Compass.

Ambos modelos, cuya comercialización arrancó a finales de julio, reciben exactamente el mismo sistema de propulsión híbrido por el que permite dotar a ambos SUV de la tracción total denominada por la marca 4xe. Esto, por si mismo, sitúa a Renegade y Compass en un nicho del mercado SUV en el que (con tamaño parecido) el primero de los Jeep es, con diferencia no sólo el más pequeño de los híbridos enchufables (PHEV) 4×4, sino también uno de los más pequeños híbridos del mercado ya que sólo el nuevo Renault Captur E-Tech lo es más y sólo tienen tracción total los Mini Cooper SE Countryman, BMW X1 xDrive25e/X2 xDrive25e y Range Rover Evoque.

De todos, sin embargo, el Jeep Renegade es el que tiene el precio más bajo en una de sus versiones (arranca en los 39.750 €, con el Limited de 190 CV), en tanto que el Mini Countryman cuesta menos que cualquiera de las del Compass (43.200 €). Más asequible que ambos Jeep es el Mitsubishi Outlander PHEV, un SUV más grande (mide 4,70 m por los 4,24 y 4,39 de Renegade y Compass, respectivamente) pero de potencia parecida a la variante más potente de los modelos de FCA.

Y es que, otra de las particularidades de los Jeep 4xe es que sus sistemas de propulsión ofrecen dos niveles de potencia distintos: 190 CV, que se asocia con el nivel de acabado Limited; y 240 CV, disponible para los Trailhawk y el nivel S.

Vaya por delante que no hay grandes diferencias de prestaciones entre elegir entre una u otra potencia, pues con el sistema de propulsión más potente se alcanzan los 199 y 200 km/h de velocidad máxima -Renegade y Compass, respectivamente- o se acelera de 0 a 100 km/h en 7,1 y 7,3 s; mientras que con la potencia combinada de 190 CV esas puntas son de 182 y 183 km/h y la aceleración, 7,5 y 7,9 s.

Tracción mecánica para el eje delantero y eléctrica para el trasero

El nuevo motor de 1,3 litros de gasolina es el encargado por si solo de dar tracción a las ruedas delanteras, el que hace que la se produzca esa diferencia entre las dos versiones de los Renegade y Compass 4xe en tanto que ofrece, bien 130 CV, bien 180 CV con un ligero incremento del régimen al que se obtiene la segunda; y siempre el mismo par máximo de 270 Nm.

En estos rendimientos, nos cuentan los técnicos de Jeep, también está contabilizado el trabajo del más pequeño de los dos motores eléctricos, el que está ligado mediante una correa al cigüeñal del motor de inyección directa y sobrealimentado con turbo.

Este motor eléctrico situado junto al de gasolina es, en realidad, un motor de arranque-generador que tiene como principal misión producir electricidad para reponer la utilizada de la batería y que su capacidad nunca baje del 18 por ciento o, incluso, forzando la producción de energía a través de la función E-Save activa. La otra acción E-Save, la pasiva (se elige entre una y otra en la pantalla del Uconnect de 8,4”, previa pulsación del modo correspondiente en la tecla situada junto al cambio), “congela” el uso de energía de la batería.

Este motor-generador, llegado el caso, puede hasta se sumarse a la cadena cinemática a través del motor de gasolina. En ésta, es el segundo motor eléctrico, y el más potente, es el que mueve el eje trasero. Se elimina, de este modo, la necesidad de un eje de transmisión que traslade la fuerza del motor de gasolina. Este motor eléctrico es siempre de 60 CV (44 kW) y aporta un par máximo de 250 Nm. Está alimentado por la batería situada bajo el asiento posterior y que tiene 11,4 kWh de capacidad total, de los que 8,7 kWh son los utilizables para poder homologar los algo más de 40 km de autonomía sólo eléctrica (52 en el mejor de los casos).

En esta situación, es el motor eléctrico trasero el único que mueve a los Renegade y Compass, aunque puede trabajar conjuntamente con el delantero si se dan las condiciones necesarias. Estas pueden ser una demanda alta de respuesta al acelerador, en cuyo caso el sistema de gestión recurre a toda la potencia disponible del sistema de propulsión híbrido; o que sea la necesaria la intervención de la tracción a las cuatro ruedas, ya sea porque se detecta una pérdida de tracción o porque desde el mando giratorio situado por delante del cambio el conductor lo demanda.

Regeneración eléctrica en marcha a voluntad

El motor eléctrico del eje trasero también tiene por tarea recuperar energía cuando no se está acelerando (e-Coasting para Jeep), lo que puede realizar en dos niveles: el estándar, en el que percibimos picos de producción de 18 kW gracias a la instrumentación; o el reforzado, el equivalente en otros modelos electrificados al B o Brake.

El primero es el que se activa por defecto y este último Brake se selecciona con una tecla en la base del cambio (donde otros Jeep tienen la desconexión del Auto Start Stop) y regenera hasta 30 kWh a la vez que retiene mucho más efectivamente a los coches. Gracias a esta capacidad, se puede apoyar el trabajo del sistema de frenado hidráulico en situaciones puntuales. La capacidad de frenado de los Jeep -al menos en el Compass que pudimos conducir- no da la mejor de las impresiones, por otro lado, en tanto que su pauta de funcionamiento cuando se pisa el pedal no es lineal: se produce una perceptible diferenciación entre la situación en la que presumimos que es el motor eléctrico está actuando y el momento en el que entra en acción el sistema hidráulico.

Además de la función E-Save, hay otras dos a disposición del conductor: Hybrid, que es la que también aparece por defecto al arrancar; y Electric. Están junto al mando del Select Terrain y en el primer caso, le cedemos al sistema de gestión la capacidad de elegir en qué momento ha de actuar el eje delantero térmico o el trasero eléctrico. En el Electric, por el contrario, forzamos el trabajo en exclusiva de este último, salvo que haya circunstancias en las que pueda ser necesario que entre en juego el motor térmico. Por ejemplo, porque hemos agotado la batería, aceleramos a fondo o estamos rodando por encima de 130 km/h.

Preparado para el off road

El control rotativo Select Terrain, por su parte, permite definir los modos de conducción según el terreno por el que los Jeep Renegade y Compass 4xe se estén moviendo. En la mayoría de casos el Auto es el más recomendable, en tanto su capacidad para gestionar la tracción, aunque es también posible activar el Sport, en el que la respuesta al acelerador es más rápida.

Estos dos se diferencian de los demás, porque en ellos puede trabajar un solo motor; mientras que en el resto son los dos, tanto el de gasolina como el eléctricos, los que están activos. Es lo que ocurre en Snow, el modo con el que se pretende aportar adherencia extra en suelos deslizantes o Sand/Mud, más propicio para terrenos con firme suelto.

En las versiones Trailhawk hay otra opción más, el modo Rock, para rebasar obstáculos grandes o piedras sueltas de buen tamaño, y que queda activo cuando presionamos la función 4WD Low. Esta simula el trabajo de una reductora al impedir que el cambio pase de segunda marcha y fuerza el arranque en primera.

Estos Trailhawk sólo disponen del sistema de propulsión híbrido de 240 CV -42.400 euros para el Renegade, 45.400 para el Compass; 4.000 euros más ambos que los Trailhawk de 180 CV Diesel- y, además, se caracterizan por incorporar protecciones, suspensiones y ruedas específicas -además de por su aspecto-.

La otra función especial para circular fuera del asfalto es AWD Lock, también disponible como el AWD Low en todos los Renegade y Compass híbridos enchufables, sea cual sea la versión. Hace trabajar ambos motores ofreciendo una distribución constante del par -la relación también varía con el modo elegido en Select Terrain– y en tanto que no pasemos de 15 km/h. Probada en un circuito off-road se siente efectiva en tanto que permite superar los obstáculos a punta de gas: hay mucho par a disposición de la tracción y no hay problema con que unas u otras ruedas queden en el aire -el recorrido de suspensión de ambos es corto- porque con una sobre el firme es posible seguir progresando suavemente. De hecho, esta suavidad es la sensación predominante frente a una posible mayor brusquedad de los SUV o TT exclusivamente térmicos en circunstancias.

La electricidad, preponderante en la tracción

Ya en la carretera y usando el modo Hybrid y con el Select-Terrain en Auto, la sensación es que el Jeep Compass -todas las apreciaciones de conducción son trasladables al Renegade- es un híbrido muy eléctrico, pues la mayor parte del tiempo aprovecha el impulso del motor trasero. Con tanta intervención eléctrica, el consumo parece muy contenido pues en los 25 km realizamos -muy pocos, apenas un par de ellos, con el modo Electric- el consumo medio estuvo por debajo de 5 l/100 km.

Obviamente, como en todo PHEV en los Renegade y Compass 4xe es posible recargar la batería no sólo en marcha, sino también conectando el vehículo a la red eléctrica. La potencia máxima con corriente alterna que admite el cargador embarcado es de 7,4 kW, lo que supone que una carga puede completarse en la mejor de las situaciones, y de estar vacía la batería, en menos de dos horas. En todo caso, cualquier enchufe doméstico le sirve, sin necesidad de tener que recurrir a uno tan potente.

Con las aplicaciones disponible para los teléfonos móviles que proporciona Jeep o con la pantalla Uconnect es posible determinar no sólo cuándo arranca el proceso de carga o si queremos acondicionar la temperatura del habitáculo durante la carga. También desde el smartphone es posible verificar la autonomía, nivel de combustible, presión de ruedas o mantenimientos; encontrar la posición exacta del coche y bloquear o desbloquea puertas, encender luces… Así como descargar rutas, verificar la autonomía sobre un mapa o incluso pagar la carga tras identificar donde se encuentra la estación pública de recarga.

Equipamiento y precios

Ambos Jeep 4xe arrancan del nivel de equipamiento Limited, el tercer nivel con otros motores. En el Compass el equipamiento de serie incluye el climatizador bizonal, radio digital, faros bixenón y pilotos con LED, faros antiniebla con función cornering, iluminación ambiental, pantalla Uconnect de 8,4” con navegador, aviso de colisión de salida de carril, sensores de aparcamiento traseros, cámara de visión trasera, sensor de presión de neumáticos, instrumentación con pantalla TFT de 7, cuatro elevalunas eléctricos y retrovisores exteriores eléctricos y calefactables, seis airbags, asientos delanteros regulables en altura, respaldo trasero abatible en tres partes, llantas de aleación de 18” o barras de techo cromadas.

En los Compass S son de serie, adicionalmente a la dotación de los Limited, la tapicería de cuero, pintura bicolor, llantas de 19″, sistema de sonido Alpine, asiento del conductor con memoria y portón trasero eléctrico.

Los Renegade, por su parte, cuentan con climatizador bizonal, control de velocidad de crucero adaptativo, control de descensos, llantas de aleación de 17”, instrumentación con pantalla TFT de 7”, Uconnect con navegador y pantalla de 8,4”, sensores de aparcamiento delanteros, aviso de colisión frontal, de salida de carril, asiento trasero abatible en dos partes asimétricas, asientos delanteros con regulación de altura, faros antiniebla e iluminación ambiental con LED.

Los Renegade S añaden, entre otros elementos, llantas de 19”, tapicería de cuero, barras en el techo cromadas, retrovisores abatibles o acceso y arranque sin llave. Para los Trailhawk, además de elementos que distinguen su carrocería como el vinilo negro del capó, las barras del techo grises, las llantas o los paragolpes específicos, también son de serie los neumáticos M+S, las protecciones para los bajos o la suspensión off-road, con mayor altura al suelo.

PRECIOS (€)
Renegade Limited 1.3 PHEV 190 CV39.750
Renegade Trailhawk 1.3 PHEV 240 CV 42.400
Renegade S 1.3 PHEV 240 CV 43.400
Compass Limited 1.3 PHEV 190 CV 43.200
Compass Trailhawk 1.3 PHEV 240 CV 45.400
Compass S 1.3 PHEV 240 CV 46.400

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