La multinacional americana fabricante de neumáticos presentó en el pasado Salón de Ginebra su neumático prototipo Goodyear IntelliGrip Eagle 360, dotado de una serie de sensores para servir de apoyo a los sistemas de control de los vehículos de conducción autónoma, el primero para esta futura modalidad de conducción.
Dado que estos vehículos funcionan a base de recibir los datos de otros vehículos, así como de conductores, peatones y organismos urbanos, el Goodyear IntelliGrip actuaría como intermediario en el intercambio de esta información. Con la convicción por parte de entidades y usuarios de que la conducción autónoma será una realidad dentro de 10 años y de que la tendencia a evitar accidentes fomentará su introducción, los neumáticos del futuro adquirirán mayor protagonismo como banco de pruebas de la misma y como único contacto entre vehículo y piso.
Los sensores aplicados en la banda de rodadura de este neumático experimental pueden percibir muchos datos del estado del firme sobre el que ruedan, estado de la superficie, si está seca o mojada, fría o caliente… El IntelliGrip dispone de un indicador activo de desgaste, cuyo nivel es registrado por unos sensores, así como la presión del aire del neumático, cuyos datos son interpretados según unos algoritmos especiales que computan presión y temperatura del neumático para obtener una estimación más objetiva de su estado y mejorar el sistema de control autónomo del vehículo.
Además de registrar las condiciones del piso y la propia rueda, el neumático se comunica con el ordenador central del vehículo, para determinar las mejores prestaciones del mismo en confort y seguridad. Si el neumático registra que la superficie sobre la que rueda está mojada o es deslizante, el ordenador corregirá la velocidad del coche en función de su agarre. Igualmente, permitirá la máxima adherencia posible en curva, para reducir distancias de frenado y para apoyar la actuación de los sistemas de prevención de colisiones. Goodyear prosigue el desarrollo de este neumático, aún experimental, colaborando con otros fabricantes para la mejora de la conectividad de los sensores y su interacción con los sistemas electrónicos de control de estabilidad (ESP), frenos (ABS) y suspensión (amortiguación variable).