Lotus, que parece «la falsa moneda» tras pasar de mano en mano (GM, Artioli, Proton…), podría resucitar al pasar al control de la china Geely, ya propietaria de Volvo, que se ha hecho con la británica al adquirir la malaya Proton, última propietaria de la marca británica.
Lo curioso es que Lotus podría recuperarse produciendo no solo coches deportivos (solo 1.607 en 2016), su especialidad, sino… también taxis. La razón es que Geely compró hace cuatro años al especialista británico en “cabs”, la London Taxi Corporation, que domina el mercado inglés del taxi, fabricando los clásicos taxis londinenses para todo el Reino Unido. La fórmula funciona bien allí, y Geely ha querido exportarla a China y Asia, donde no ha funcionado tan bien. La causa es que el diseño del “cab” londinense de 7 plazas se ve allí anticuado, y por ello Geely podría encargar a Lotus un nuevo taxi moderno de 7 plazas, con chasis de aluminio y motores y sistemas de seguridad Volvo (en vez de los Toyota que montan los taxis británicos).