Un capricho sólo apto para circuito
El Ferrari P80/C es el curioso y espectacular encargo de un apasionado cliente de la marca del «cavallino» inspirado en los legendarios modelos de carreras de la marca de Maranello de los años 60, realizado exclusivamente para ser conducido en circuito.
Esta primavera Ferrari ha sorprendido a su público más fiel creando como coche único de encargo por un cliente (“one-off”) el Ferrari P80/C. A pesar de que se inspira en los legendarios modelos de carreras de la marca de Maranello de los años 60 del pasado siglo, su originalidad radica en que no parte de un modelo de producción sino de uno de carreras como es el F488 GT3, y como éste sólo se puede utilizar en competiciones en circuito sin posibilidad de homologarlo como modelo de calle.
El nombre de Ferrari P80/C, un tanto anodino, también ha sorprendido un poco ya que desde Maranello se había filtrado un vídeo en las redes donde se mostraba su desarrollo y se sugería el nombre de “Prototipo”, que finalmente se ha quedado en el nombre de este vídeo.
Ferrari P80/C: líneas y detalles retro
La mayoría de los elementos comunes de producción con el Ferrari 488 han sido eliminados en aras de la ligereza (aunque Ferrari tampoco ha facilitado su peso), con un amplio uso de la fibra de carbono en todos sus componentes.
Su diseño curvilíneo con la cabina burbuja y sus tomas de aire recuerdan al rapidísimo Ferrari P3, al emblemático 250 LM y hasta al Dino 206S, pero con una aerodinámica mejorada aunque haya sido al precio de instalar un aparatoso alerón posterior y un no menos espectacular escudo difusor inferior. Por delante, un fino deflector frontal inferior actual como “labio” aerodinámico de extremo a extremo, mientras que un perfilado deflector de techo y las taloneras laterales para delimitar el “efecto suelo” acaban de rematar su estampa.

El interior es estrictamente de competición, con asientos tipo “buckets” y cinturones de arnés, cuadro digital, jaula anti-vuelco de seguridad, volante cuadrangular, etc. Bajo este impactante diseño tenemos el mismo chasis del Ferrari 488 GT3, modificado y reforzado en algunos puntos (su batalla es ya 5 cm mayor que la del Ferrari 488 GTB) y además aligerado, teniendo en cuenta que como ejemplar único que no va a ser matriculado puede prescindir de las limitaciones impuestas a un modelo de calle, o incluso de las certificaciones de homologación para una determinada categoría deportiva (Sport Prototipo, GT3, etc).
Ferrari P80/C: con más de 700 CV
En cuanto al motor de esta “berlinetta” de competición, es el V8 3.9 biturbo del GT3, pero que sin las restricciones de éste su potencia no se limitará a 550 CV, sino que deberá estar en torno a los 720 CV de los recientes Ferrari 488 Pista o del recientemente presentado en el Salón de Ginebra Ferrari F8 Tributo (se especula con unos 740/750 CV, pero Ferrari no ha dado ninguna cifra de potencia). Lo único que se sabe es que es un coche de encargo, del que tampoco ha transcendido su precio (se supone que “muchimillonario”), cuyo desarrollo se inició en 2015 bajo el nombre de código de SP36 (y que ha tardado lo suyo en plasmarse, ya que en 2018 se presentó y entregó oficialmente el SP38).

El cliente no solo ha elegido el color rojo de esta pieza única, sino también hasta su denominación como “rosso vero”, así como un doble tren rodante (se supone que uno “de paseo” y otro “racing”) con llantas especiales de tuerca única de 18” y 21” de diámetro cada uno. Con su aire de 330 P3 (ó P4) del siglo XXI, no es probable que veamos este Ferrari P80/C “de cuerpo presente”, ya que quienes encargan este tipo de coches sólo lo hacen para su particular solaz, sin que de verdad lleguen nunca a competir. Como tampoco sabremos nunca su precio, hasta que aparezca en alguna subasta exclusiva dentro de una o dos décadas…