Esta vez nos adelantamos: el jurado del Coche Europeo del Año, galardón que este año cumplía su primer medio siglo de vida, ya que empezó a entregarse en 1964 (en realidad 1963, ya que el primer modelo premiado -el Rover 2000 TC- correspondía a aquel año) ha elegido como nosotros al Peugeot 308 como Coche del Año 2014 en Europa (nosotros en España), quedando finalistas algunos de los mismos modelos que en nuestro premio (caso del Mazda3, en quinto lugar, por segundo en el nuestro, o el C4 Picasso, premio MOTOR MUNDIAL como Coche Familiar y de Ocio 2014, y cuarto finalista europeo al Coche del Año). Y lo mismo se puede decir del nuevo Skoda Octavia, sexto finalista europeo y cuya versión familiar Combi ha quedado tercero en nuestro premio al Coche Familiar y de Ocio, o la Clase S de Mercedes (último finalista del certamen europeo pero nuestro vencedor como Coche de Vanguardia del Año 2014), seguido por el BMW i3 (también segundo clasificado en el certamen europeo).
En realidad, esta elección europea sería más representativa de no registrarse a menudo un peso excesivo de la votación de algunos de los 24 jurados europeos (en concreto los escandinavos) hacia modelos cuya novedad y oferta no se corresponde con su peso y presencia real en el mercado. En concreto, la distorsión “eléctrica” que ha hecho del i3 de BMW el primer finalista tras el ganador (no lo criticamos: aunque caro y minoritario, está presente en los mercados europeos) y del Tesla S el tercero, elección ésta sí poco justificable (como ya ocurrió en su día con el Nissan Leaf) cuando apenas si se vende en dos o tres países de la UE (y no tanto por sus 70.000 euros de precio teórico en nuestro país, donde sigue sin verse por nuestras calles).
En todo caso nos felicitamos por ver que la racionalidad va imponiéndose : si se eligen eléctricos, son ya “range extended” (fórmula que siempre hemos apoyado mientras se mantenga la actual insuficiente duración de baterías), y la funcionalidad inteligente (Peugeot, Mazda, Skoda…) predomina sobre el “vanguardismo de salón”, nunca mejor. Fue desvelado en la apertura del Salón de Ginebra, donde lo recogió Maxime Picat, director general de Peugeot Automobiles, muy satisfecho de que el 308 sea el cuarto Peugeot en lograr este premio, tras del 504 (1969), 405 (1988) y 307 (2002).