DGT: A POR ESTADÍSTICAS FIABLES

22 mayo, 2012
JUAN ROBREDO

Al menos entre los cambios del nuevo gobierno, hay algunos hechos con cabeza, como el de la nueva directora de la Dirección General de Tráfico, María Seguí, que está poniendo el cargo al nivel que se merece tras los desmanes cometidos por su predecesor, el inefable demagogo Pere Navarro. Seguí ha declarado que hay que mejorar las estadísticas de siniestralidad de la DGT para ponerlas al nivel de las europeas, incluyendo los fallecidos en los 30 días siguientes al accidente, y computar a la vez los muertos en accidentes urbanos (y no sólo los de carretera), que se añaden a posteriori. La estimación actual se hace como hace 20 años, lo que propicia la ocultación. Los 1.729 muertos de 2010 (en carretera y dentro de las 24 horas siguientes al accidente) fueron luego 2.500, mientras que en 2001, se pasó de 4.000 largos a más de 5.500. Y tampoco son cifras exactas, ya que para los fallecidos en los 30 días siguientes se aplica un cálculo estimado en factor de un coeficiente corrector… No estamos tan lejos de la falacia de 1974, donde los 7.400 muertos de entonces (el peor año en la historia del automovilismo español) fueron en realidad más de 14.000 (o sea el doble). Urge aplicar criterios claros y verificables, y hacerlos públicos al terminar el año, y no seis meses después…