El fabricante norteamericano de componentes está desarrollando un nuevo equipo de inyección directa de gasolina GDi que hace de él el sistema de mayor presión y más silencioso del mercado.
La a 290 CV (iguala al inyección directa de gasolina GDi de Delphi, en servicio desde 2010 presenta ahora una nueva generación estrenada ya en un constructor europeo que va un paso más lejos en cuanto a presión de inyección, precisión de la misma y supresión del ruido.
El nuevo sistema de inyección directa de gasolina de Delphi funciona a 350 bares de presión y puede llegar hasta los 400 bares sin más actualizaciones. Hay ya un equipo avanzado en desarrollo del mismo trabajando bajo presiones más altas (500 bares), lo que permite suponer que en breve plazo este nivel se ofrecerá en la siguiente generación GDi. De este modo, gracias a los inyectores solenoides multiperforados, el sistema consigue una atomización óptima del combustible en la cámara, mejorando la combustión y reduciendo sensiblemente las emisiones de CO2 y de partículas, además de lograr una disminución del consumo.
