Además de buen jugador de fútbol, ahora ya al final de su carrera, David Beckham es también un gran aficionado a los automóviles clásicos, en especial deportivos. El ex-madridista futbolista británico (ahora en el PSG parisino) tiene una buena colección, cuya última adquisición, que se ha regalado a sí mismo por su 38 cumpleaños ha sido un Porsche 911 S de 1966, réplica exacta del que utilizó el actor Steve McQueen en la película Le Mans, pilotado por el mismo. Con un motor original (el 6 cilindros “boxer” de 180 CV) e idéntico color (gris oscuro metalizado) y exterior, Beckham partió de un modelo en muy buen estado al que ha reconvertido en el 911 S de McQueen hasta el último detalle. Primero intentó pujar por el modelo original auténtico de la película, que aún existe, y que fue subastado en la subasta californiana de Pebble Beach hasta alcanzar el millón y cuarto de euros, cifra que muy juiciosamente fue considerada como totalmente desproporcionada por David Beckham (que estuvo en ella y dejó de pujar cuando se llegó al millón de euros) quien se ha gastado ahora en su flamante 911 S “McQueen” sólo la módica cantidad de 83.000 euros…
