Presentado en el concurso italiano de elegancia de Villa d’Este, a orillas del lago de cómo, este BMW Zagato es una depurada evolución del Z4 Coupé, sobre su misma plataforma, que anticipa lo que será dentro de un par de años el futuro sucesor de la saga del coupé compacto de la marca bávara.
BMW ha dejado claro que se trata de un “concept” en homenaje a su colaboración con el carrocero italiano. Pero no es nada normal hacer un “concept” con hechuras de coche de calle, hasta el punto de que tal como está podría ser homologado inmediatamente para su producción industrial. Según Andrea Zagato, lo fácil es hacer un coche “que sabes que no va a ser usado en carretera”. El desafío auténtico está en hacer un coche “con todos los requisitos legales para circular por carretera”. Y sin duda tiene razón; pero no parece gratuito que Adrian van Hooydonk, responsable de diseño de BMW, haya encargado este coupé sobre la base del Z4 tan posibilista que a todos nos recuerde una versión “latinizada” del actual Z4.
Proporciones y tamaño varían poco; tenemos el mismo larguísimo capó del Z4, con un frontal similar donde los “riñones” se inclinan un poco hacia el interior, siguiendo el diseño convergente de los faros oblicuos (con las ópticas circulares típicas de BMW en su interior). Zagato ha marcado su impronta sobre todo en el centro y la zaga, con unos pilotos laterales que imitan la salida de unas “branquias” del motor, y un techo con un suave doble abultamiento central (al estilo del Peugeot RCZ) que no llega a prolongarse por la luneta. La cola pretende imitar el remate continuo de perfil superior e inferior de los primitivos 328 Mille Miglia (la llamada trasera Kamm, en nombre del primer carrocero que la empleó allá por los años 30 del pasado siglo), pero la verdad es que apenas si es una reminiscencia de aquella, más abrupta. Todo es suave y redondeado en este BMW Zagato Coupé, que sin embargo, no deja se presentarse como un auténtico y agresivo coupé sport, de motor delantero y propulsión trasera.
El interior recuerda al del Z4 en casi todo (no en vano se ha partido de uno para su creación), pero todos los asientos y revestimientos son artesanales, en cuero cosido a mano, y no podía faltar la Z de Zagato (y también de BMW, por sus coupés Z…) en distintas partes de la carrocería y el interior, firmando hasta los apoyacabezas. Como concurso de elegancia que es, en Villa d’Este no se dieron detalles de las soluciones técnicas de este Zagato Coupé, aunque todo indica que monta el 6 cilindros del 335i (o sea el del Z4 sDrive 35is) que con sus 340 CV tiene potencia de sobra para poder jugar su papel de superdeportivo. Aunque quién sabe, quizá para cuando salga llegue a montar hasta el 6 cilindros biturbo del futuro M3…
La carrocería, totalmente de aluminio ha sido cuidadosamente pegada y remachada a la estructura del bastidor, un trabajo en el que Carrozzeria Zagato es todo un especialista. Pero no nos engañemos; si llega a la serie, lo más probable es que su bastidor sea mixto, como en los M3, utilizando tanto acero como aluminio y la nueva fibra de carbono reforzada con plástico. Pero el diseño sí es muy posible que se repita en toda su integridad, lo que explica esa fidelidad a un modelo de calle, que quizá se corresponda con una versión especial del futuro Z4 bajo el nombre de Zagato (una edición limitada, al estilo de las que antaño hacía Lancia) o simplemente con el modelo definitivo del Z4, esta vez ya sin apelativos. Dentro de dos años –incluso quizá antes– lo sabremos…