
La búsqueda de baterías con mayor potencia y energía que pudieran reemplazar a las baterías actuales de iones de litio, necesarias para los vehículos eléctricos ha llevado a los investigadores del Departamento de Energía de los Estados Unidos, a demostrar en el laboratorio Berkeley, que la batería ion litio – azufre tiene más del doble de capacidad que las actuales de ion litio, consideradas las más eficientes hoy en día en el mercado. Además, la flexibilidad para recarga llega a más de 1.500 ciclos con apenas caída de capacidad.
Un vehículo eléctrico que tuviera más de 400 km de autonomía necesitaría una batería que ofreciese de 350 a 400 Watios-hora/kilo (Wh/kg). Esto es casi el doble de los 200 Wh/kg que nos dan las baterías de ion litio. Además, necesitaría tener un mínimo de 1.000 y, preferiblemente, 1.500 ciclos de carga/descarga sin que se mermase la capacidad de acumulación de energía.
Este comportamiento a nivel de laboratorio tiene que ser ahora testado y sometido a condiciones extremas en escala superior, para poder realmente vislumbrar si este es un camino viable para equipar los vehículos eléctricos y hacerlos equiparables a los de combustión interna.