El vicepresidente mundial del Grupo Volkswagen, Francisco Javier García Sanz, se reunió ayer en Madrid con el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, para trasladarle la última información relacionada con las emisiones de los motores del grupo Volkswagen.
Tras el comunicado, el pasado martes, del máximo responsable del grupo Volkswagen Matthias Müller, en el que se reconocían motores con irregularidades también en las emisiones de CO2, García Sanz ha explicado al ministro Soria que estas irregularidades afectarían a unos 50.000 vehículos en el mercado español. Si se confirmase este número, el grupo Volkswagen tendría que devolver al Estado las ayudas concedidas por el Plan Pive (1.000 € por vehículo), un máximo de 50 millones de euros.
«Fruto de la voluntad de transparencia y veracidad que hemos adquirido en el marco de las investigaciones internas sobre el asunto de emisiones, he trasladado al ministro Soria el compromiso del Grupo Volkswagen de informar puntualmente a las autoridades españolas sobre cualquier novedad que se produzca en relación con este tema», indicó García Sanz.
Volkswagen AG subraya que los vehículos afectados son técnicamente seguros y aptos para la circulación y garantiza que se hará cargo de todos los costes que pudieran derivarse de las irregularidades detectadas, incluyendo las posibles ayudas que por los programas PIVE hayan podido recibir los usuarios en su caso.
Por su parte, el ministro José Manuel Soria ha asegurado la colaboración del Gobierno español para determinar los medios necesarios al objeto de resolver este asunto en el mejor interés del consumidor.
Asimismo, Francisco Javier García Sanz ha reiterado el compromiso del Grupo Volkswagen con España en cuanto a las inversiones previstas por el grupo, tal y como adelantó la semana pasada en Barcelona.