El SUV compacto de Hyundai tiene reputada fama de duro, pero aun así ha sufrido diversos ajustes en garantía sin llegar a forzar llamadas a revisión (problemas con el embrague bi-masa al quitar el contacto, arranques problemáticos en frío con los motores de gasolina, dureza de cambio, ruidos de suspensión, fallos del navegador, cerraduras erráticas, luz diurna de diodos frágil, etc), normalmente solucionados en garantía. Pero sí se detectó un problema que por afectar a los frenos obligó a una llamada a revisión general; fue en febrero de 2012 sobre algunas series del iX 35 con motor 1.7 CRDI fabricadas en 2010 y 2011, donde el fallo de la bomba de depresión del servofreno tras un uso intenso de los frenos podía provocar la ausencia total de la asistencia, con el consiguiente endurecimiento del pedal y falta de potencia frenante. Tras proceder al subsiguiente aviso, se procedió al reemplazo sin cargo del servofreno en las unidades afectadas.
