
Mary Barra, actual presidenta ejecutiva de General Motors (GM) desde el pasado enero, no pudo dar explicaciones ante la Subcomisión de Investigación del Congreso de Estado Unidos sobre el retraso de 10 años en llamar a revisión a los 2,6 millones de coches de las marcas de GM afectadas (a partir de 2003) por el mal funcionamiento del motor de arranque. Esta avería, que en España afecta a 132 unidades del Opel GT, se producía desde la llave de contacto, apagando el motor y dejando sin actuar a los airbag. A este mal funcionamiento se le considera culpable en una primera investigación realizada por la NHTSA (Agencia Nacional de Seguridad Vial estadunidense) de al menos 32 accidentes en los que se produjeron 13 víctimas mortales, cuyos familiares se manifestaron a las puertas del Capitolio durante la sesión.
Mary Barra, aseguró que no pudo explicar a la Subcomisión del Congreso por qué se tardó 10 años en llamar a revisión a los coches afectados, puesto que ella no ocupaba en esa época posiciones en la empresa desde las que tuviera acceso a ese tipo de información, pero sí reconoció que GM recibió desde 2003 más de un centenar de quejas de usuarios por parárseles el motor en plena marcha y que hasta 2007 los ingenieros de GM no identificaron la pieza defectuosa (que fue sustituida a partir de entonces, sigilosamente, aunque no se cambió el número de su referencia industrial), por lo que se comprometió a realizar una exhaustiva investigación dentro de su compañía, por si alguno de sus ingenieros hubiera faltado a la verdad cuando declararon ante la NHTSA.
No obstante, algunos de los integrantes de la Subcomisión se negaron a aceptar las declaraciones de Mary Barra, ya que ella fue, por aquel tiempo, directora de la fábrica de Hamtramck (Detroit), siendo ascendida en 2008 a vicepresidenta mundial de ingeniería de producción de GM. Como se recordará, GM fue rescatada en 2009 por el presidente Obama con una inversión de 50.000 millones de dólares…
Por su parte, la Agencia Federal de la Seguridad Vial de Estados Unidos (NHTSA) ha multado a GM con 7.000 dólares diarios, a partir del pasado 3 de abril, por el retraso en la entrega de documentos sobre la citada revisión de 2,6 millones de coches y ello pese a haber recibido ya 200.000 folios sobre este tema, porque en ellos sólo se contiene el 65% de la información requerida por la NHTSA.