Los motores turbodiesel 2.0 TDI y el turbogasolina 2.0 TFSI que equipan los Audi A4, A5 y Q5 aumentan su potencia base, que pasa de 143 a 150 CV en el 2.0 TDI y de 211 a 225 CV en el 2.0 TFSI. Las mejoras se obtienen sin aumento del par ni del consumo, cumpliendo ambos motores desde ahora la futura normativa de emisiones Euro 6.