Han sido oficialmente anunciados por Marchionne (acompañado de su “delfín”, John Elkann) dentro del ambicioso plan de remodelación de la factoría de Melfi, que se convertirá en la más moderna e importante del grupo, capaz de producir a tres turnos desde 2014 una cadencia de 1.600 vehículos diarios, compartiendo líneas comunes hasta 4 modelos distintos. Para ello recibirá una inversión adicional de mil millones de euros. Y entre su producción ampliada se cuentan los nuevos mini SUV, el Fiat 500X (derivado del 500 L) y un Jeep compacto, el primero de esa marca que se fabricará en Italia para todo el mundo, ambos desarrollados sobre una plataforma común, la modular pequeña del grupo Fiat.