Sobre el asfalto de Hockenheim
El embajador de Porsche, y dos veces campeón del mundo de rallyes, Walter Röhrl, se ha puesto al volante de un prototipo camuflado de una nueva versión del Porsche Cayenne de altas prestaciones, sobre el asfalto del circuito de Hockenheim. El piloto de pruebas de Porsche Lars Kern le ha acompañado.
Desarrollada a partir del Cayenne Turbo Coupé actual, esta nueva variante ha sido diseñada y desarrollada para proporcionar una dinámica longitudinal y lateral óptimas. “El coche es increíblemente estable, incluso en curvas rápidas, y su comportamiento es muy preciso en las trazadas. Más que nunca, tienes la sensación de estar sentado en un deportivo compacto en lugar de en un SUV de gran tamaño” ha afirmado el propio Walter Röhrl al terminar la prueba.
Esta versión está enfocada hacia el asfalto, con altas prestaciones pero apto para uso diario. Para ayudar en su faceta deportiva, además de algunas mejoras en el chasis, se utiliza el sistema de estabilización activa de Porsche Dynamic Chassis Control, que controla la nivelación y equilibrio de la carrocería. Además, el eje delantero ha sido totalmente renovado, añadiendo unas llantas delanteras de 22 pulgadas, casi 1,5 cm más anchas que las del Porsche Cayenne Turbo Coupé, y se ha incrementado la caída negativa 0,45 grados, lo que mejora el agarre de los neumáticos especialmente diseñados para esta versión.
El resultado es un vehículo increíblemente estable, incluso en las curvas más rápidas, con un comportamiento muy preciso al trazarlas, lo que da la sensación de estar al volante de un deportivo compacto en lugar de en un SUV de grandes dimensiones. Este resultado mejora significativamente los obtenidos históricamente desde su presentación en 2002, donde el Cayenne combinaba el rendimiento con la versatilidad de un uso a diario. El primer Cayenne Turbo S (2006) con 521 CV de potencia, era especialmente dinámico y a partir de 2007, los modelos GTS fueron específicamente ajustados para obtener la máxima deportividad.