Con más de tres millones de unidades vendidas, el Peugeot 307 es uno de los pilares de la marca del león pero sus días están contados porque su sucesor ya está listo.
Esta vez, Peugeot cambia digitos y el sucesor del 307 se denomina 308 y aunque tiene mucho que ver con aquel, destila mucha personalidad. De partida se ha tomado la plataforma del 307 mejorada pero las dimensiones difieren algo, ya que si bien la distancia entre ejes sigue siendo la misma, la longitud ha crecido 7 cm hasta alcanzar los 4,27 m, la anchura es de 1,81 m habiéndose incrementado en 8 cm ya que el ancho de vías también ha aumentado 4 cm, y la altura ha disminuido un centímetro. Este incremento afecta también al maletero que pasa a disponer de una capacidad de 430 litros ampliable hasta los 1.250 litros abatiendo el asiento trasero; sus formas internas son muy rectangulares y por tanto aprovechables al máximo en tanto que debajo del piso de carga, aunque se aloja una rueda de emergencia, hay espacio para que pueda albergar una de tamaño normal eliminando un pequeño distribuidor.

Una de las principales preocupaciones del diseñador de la marca, Gerard Welter era el de conseguir una carrocería con una línea muy aerodinámica y lo ha logrado, ya que se ha obtenido un Cx de 0,29, un valor muy bueno. La carrocería presenta una imagen que recuerda en muchos aspectos a la del 207, pero el frontal es algo más dinámico gracias a varios factores.
El parabrisas de grandes dimensiones presenta una mayor inclinación, el capó motor está más resaltado, los grupos ópticos de cuatro faros son más grandes y alargados hacia arriba y los faros antiniebla ahora rectangulares van en los extremos del frontal, sin olvidarnos, por supuesto, de la clásica calandra de grandes dimensiones que caracteriza a los modelos de la marca y que hace que se parezca mucho a un 207 en grande.
La zaga ofrece una aspecto más robusto y los pilotos presentan un diseño en arco para resaltar los flancos. Algunas versiones ofrecerán la posibilidad de adoptar un techo panorámico de 1,3 m cuadrados con lo que se disfrutará de mucha luminosidad.

En el interior, todo es nuevo, empezando por el salpicadero que presenta un cuadro de instrumentos configurado por dos grandes relojes con el borde cromado menos relevante que en el 207, cinco bocas de aireación, y una consola central bastante sobreelevada lo que hace que la palanca del cambio quede muy al alcance de la mano del conductor. La guantera no parece muy espaciosa pero puede suplirse por el hecho de que hay buenos huecos en la zona central delantera y también en las puertas, incluidas las traseras, lo que no es tan frecuente. La habitabilidad es buena en todas sus plazas; en las traseras, la disponibilidad de espacio longitudinal es superior a la del 307 gracias a que los asientos delanteros llevan una estructura de menor espesor que permite ganar algún centímetro y a que los pies de los ocupantes de estas plazas traseras pueden me-terse por debajo del asiento delantero, lo que ayuda mucho; por lo demás, hay buena altura libre al techo y la anchura es más generosa.
Algo más molesto resulta entrar y salir de estas plazas traseras debido a la anchura del larguero inferior y eso que el grado de apertura de la puerta es muy generoso.
La presentación está muy cuidada así como los materiales que son de calidad con unos plásticos de muy buena textura. Se ha trabajado en el incremento de la seguridad activa y pasiva y dispondrá de nueve airbag, ofreciéndose también faros bixenon direccionales y avisador de cambio de carril. Por lo que respecta a suspensiones, el 308 monta las mismas del 307 aunque revisadas y mejoradas, dado que las vías son más anchas.

El 308 saldrá con cuatro motores, dos de inyección directa de gasolina fruto de la colaboración con BMW y dos diesel HDI, todos ya conocidos en el 207 y los diesel también en el 307, pero los técnicos han trabajado en ellos para mejorar su consumo y reducir la emisión de CO2. En gasolina hay un 1.6 litros de 120 CV al que se le ha reducido el consumo un 10% quedando el mixto homologado en 6,7 litros. La segunda versión es el 1.6 litros turbo de 150 CV que consume un 9% menos y ofrece 7,1 litros a los 100 km.
En cuanto a los diesel, el 1.6 HDi de 110 CV rebaja el consumo un 6% y ofrece 4,7 litros en tanto que el 2.0 litros de 136 CV se queda en 5,5 litros. Los menos potentes van con un cambio manual de 5 marchas y los otros dos lo llevan de 6. Lo destacable de todo esto es que estas cifras se logran con un coche que pesa 72 kg más que el 307. Unas semanas después del lanzamiento, aparecerá un 1.6 HDi de 90 CV sin filtro de partículas (que los otros dos sí llevan) que ofrece 4,5 litros/100 km y que contamina 120 gramos de CO2 por kilómetro. Habrá también una versión híbrida basada en un motor diesel, pero su aparición se demorará hasta el 2009.
El nuevo Peugeot 308 se fabricará en la versión de 5 puertas en la planta de Sochaux y la de 3 puertas en Mulhouse. Su llegada al mercado español tendrá lugar en octubre y, como ya es habitual en la marca, habrá una versión coupé-cabrio que sorprenderá por sus líneas en la primavera de 2008, en tanto que la versión familiar aparecerá después del verano del 2008. Precios y equipamientos se conocerán con detalle más adelante.