Afortunadamente, nos encontramos en la primera carrera de la temporada. Tiempo hay para la reacción. Pero vamos, visto lo visto en Melbourne se certifica el poderío de Red Bull, la fulminante reacción de McLaren ante una pésima pretemporada, y el globo deshinchado en que se ha convertido Ferrari. No se entiende cómo no han sido capaces de fabricar un coche nuevo, al igual que todas las escuderías, sabiendo por dónde iban los tiros aerodinámicos que ya el año pasado Red Bull presentó en el Campeonato que tan brillantemente se llevó.
Avisó Red Bull en los Libres 3, donde dominaron como y cuanto quisieron. Tal fue el dominio de Vettel que a su compañero Webber le metió 857 milésimas. Alonso quedaba sexto, a 1.614. ¡Un mundo!, ¡una distancia sideral!. No podía hacer más. El Ferrari no es tan rápido. Y debería serlo, después del buen comportamiento de la pretemporada. ¿Qué ha ocurrido entonces?, ¿por qué el mal comportamiento del F150º Italia?, nadie lo sabe. Quizá la temperatura de pista, demasiado fresca, sea un motivo. Pero no puede ser excusa. Ferrari no puede pretender soñar con que los grandes premios se celebren con atlas temperaturas para que su coche caliente mejor las gomas. Se ha visto cómo el coche de Alonso sobreviraba sobremanera, estaba el coche muy nervioso. Nada que ver con los dos Red Bull: impresiona ver la majestuosidad con que se deslizan, sin perder la trazada, finos, muy finos. Jaime Alguersuari, conseguía el 13º puesto en esta sesión de Libres 3.
La calificación se presentaba dramática. Lo avisó Alonso después de la primera jornada de entrenamientos libres al señalar que será “necesario tener un buen sábado, sin errores, si quieres salir desde la primera línea». Sólo se disponen de dos juegos de neumáticos blandos que sólo sirven para una vuelta, no más. Mientras que McLaren y Red Bull sorteaban la Q1 y Q2 con sus gomas duras, Alonso pasaba el primer corte con su juego de duros, pero se veía obligado a usar un juego de blandos para el mal trago de la Q2. Estaba claro que tendría que ir al límite, como siempre. Fernando Alonso lo da todo, da más que nadie, y saca al coche algo más de lo que tiene. Pero este año no va a ser suficiente. La demostración de poderío de Vettel y en menor medida, de Webber, ha sido insultante. El tiempazo marcado en la Q3 es, sencillamente, estratosférico: ¡1:23:529!, contra el 1:24:307 del segundo en la parrilla, Hamilton. Webber hacía 1:24:395, pegadísimo al inglés, y Button 4 décimas más, a más de un segundo de la cabeza. Fernando Alonso se hacía con el 5º puesto de la parrilla, con un tiempo de 1:24:974. La distancia con Vettel, sideral. Felipe Massa sólo podía hacer 8º, que vuelve a demostrar que no puede con su compañero, Alonso. Por su parte, Michael Schumacher, que había levantado expectación en la pretemporada, con un espléndido comportamiento del Mercedes, sólo ha podido ser undécimo. No pasó el corte de la Q2.
Al terminar la sesión, Fernando Alonso no encontraba una explicación lógica a lo sucedido: «Nos gustaría ir más rápido, ayer pensábamos que éramos más rápidos, pero por alguna razón ni Massa ni yo hemos estado cómodos con el coche», señaló.
La reacción del bicampeón del Mundo, suena a resignación: “el quinto puesto es lo máximo a lo que aspirábamos”. Pero es un campeón, un luchador y que se preparen porque no va a arrojar la toalla. Moral y optimismo no le faltan al campeón español, al señalar que «En Australia siempre hay carreras emocionantes. Los McLaren no han dado más de 12 vueltas seguidas en los tests y son 58 durante la carrera, por lo que creemos que alguno de los de delante igual no acaba». Además, manifestó que «Claramente, no podemos estar contentos con este resultado, pero no hay que hacer un drama. Definitivamente no pudimos sacar el máximo partido del coche y hay que intentar averiguar el por qué». Alonso está convencido de la dificultad de acabar la carrera de Australia, donde siempre pasan cosas. Piensa el asturiano que «en Australia siempre hay carreras emocionantes. Los McLaren no han dado más de 12 vueltas seguidas en los tests y son 58 durante la carrera, por lo que creemos que alguno de los de delante igual no acaba». A mal tiempo, buena cara, a juzgar por la frase del día dicha por Alonso: “Nadie se cree que vayamos a estar a esta distancia toda la temporada”.
Es de esperar que así sea. Si no, estamos apañados. La carrera se presenta apasionante. Hamilton ya ha anunciado que va a salir con el cuchillo entre los dientes. A Vettel le espera una pesadilla plateada en las primeras vueltas. El espectáculo está garantizado. Y Alonso con la caña preparada. Esperemos que este año no le choquen como el pasado y tenga que recuperar todas las posiciones de la parrilla.
La carrera, a las 8 de la mañana, pero ojo, que esta madrugada cambia la hora, a las dos serán las tres. Yo por si las moscas, cambio ahora mismo mi reloj.
